Vivir en una gran ciudad como Barcelona tiene muchas ventajas, pero también puede traer consigo un problema bastante común: el ruido. Ya sea por vecinos, tráfico, obras o actividad comercial, muchas viviendas necesitan soluciones efectivas para ganar confort acústico.
Insonorizar una pared es una de las opciones más efectivas para reducir el sonido que entra o sale de una estancia, y en este artículo te contamos cómo hacerlo bien, qué materiales utilizar y cuándo merece la pena dar el paso.
¿Qué implica insonorizar una pared?
Cuando hablamos de insonorización, nos referimos a reducir la transmisión del sonido entre espacios mediante barreras físicas. Esto puede aplicarse a techos, suelos o ventanas, pero la solución más habitual comienza por las paredes medianeras, especialmente en pisos antiguos o con muros delgados.
Insonorizar una pared implica crear una nueva capa o revestimiento acústico, que interrumpa la propagación del sonido, absorba parte de la energía sonora y mejore el confort interior.

¿Qué materiales se usan para insonorizar?
Lana de roca o lana mineral
Es uno de los materiales más utilizados por su excelente capacidad para absorber ondas sonoras. Además, ofrece aislamiento térmico y es ignífugo.
Placas de yeso laminado (tipo Pladur acústico)
Instaladas con cámara de aire y material absorbente, permiten crear una doble pared que reduce considerablemente el ruido.
Espumas acústicas
Suelen usarse en estudios de grabación o estancias con necesidades técnicas. Tienen buena absorción pero no son estéticas, por lo que se ocultan tras paneles o revestimientos.
Membranas acústicas
Se colocan entre capas de materiales para mejorar el aislamiento sin aumentar demasiado el grosor de la pared.
¿Cómo se hace la instalación?
- Revisión del estado actual: Antes de instalar nada, es importante identificar por dónde entra el sonido: juntas de ventanas, enchufes, grietas, etc.
- Colocación de estructuras metálicas: Sirven como base para montar las placas y permiten dejar una cámara de aire entre la pared original y la nueva capa.
- Relleno con aislante acústico: La lana de roca o similar se coloca en el interior de la estructura.
- Instalación de placas: Se atornillan las placas de yeso especiales para acústica y se sellan todas las juntas.
- Acabado final: Se puede pintar, alicatar o revestir según el estilo de la habitación.
¿Cuánto espacio se pierde?
Depende del sistema elegido, pero suele oscilar entre 6 y 10 cm de grosor. En la mayoría de casos, se prioriza insonorizar una sola pared (la que da a la fuente de ruido), por lo que la pérdida de espacio es mínima y vale la pena por el confort que se gana.
¿Vale la pena insonorizar tu vivienda en Barcelona?
Si vives en zonas con alta densidad, cerca de vías con mucho tráfico, bares o locales comerciales, insonorizar una pared puede marcar la diferencia entre una casa incómoda y un hogar tranquilo.
También es una solución recomendable si estás renovando una vivienda antigua o realizando una reforma integral en Barcelona, ya que se puede planificar junto a otras mejoras estructurales.
Además, si vives en barrios como el Eixample, donde muchas fincas comparten muros finos o antiguos con otros pisos, esta medida mejora la calidad de vida sin alterar la estética del edificio.
En OAK, cuidamos el confort acústico de tu hogar
En cada proyecto de reforma, el silencio también es parte del diseño. No se trata solo de embellecer un espacio, sino de hacerlo más funcional y cómodo.
Si estás pensando en renovar tu vivienda y quieres reducir el ruido exterior o entre estancias, en OAK te asesoramos sobre las mejores soluciones de aislamiento acústico según tu caso.
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